«Los viajes se viven 3 veces: cuando los soñamos, cuando los vivimos, y cuando los recordamos» – Anónimo

¡Buen lunes amigos tourismeros!

En esta oportunidad les traemos una linda frase para empezar la semana pensando en nuestro próximo destino.

«Los viajes se viven 3 veces: cuando los soñamos, cuando los vivimos, y cuando los recordamos»… ¿coinciden con nosotros?

«Un viaje se vive 3 veces: cuando lo soñamos, cuando lo vivimos, y cuando lo recordamos».

¿Hay algo que sea tan agotador y desgastante, y la vez hermoso y que se disfrute tanto, que los preparativos para cumplir un sueño o simplemente hacer algo que nos haga felices? Puede ser un casamiento, una fiesta de 15 años, el bautismo de un hijo, una fiesta sorpresa… y también un viaje.

Puede ser ese viaje que esperamos para irnos con nuestra pareja al Caribe o Europa. O un viaje familiar a Disney. O con amigos a Río de Janeiro, por qué no. O también, por que no, ese viaje en solitario para abrir nuestra mente por América, el sudeste asiático, o por la inmensidad de África. ¿no están de acuerdo conmigo en qué a pesar del desgaste que llevan todos los preparativos, es algo hermoso poder diagramar nuestra ruta? Si viajamos con alguien más, muy probablemente discutamos y tengamos puntos de vista diferentes: que si reservamos en este hotel o en aquel, que si salimos un sábado o un martes, que si contratamos una cobertura más amplia o una más económica… y todo eso genera cansancio, es cierto. Pero el hecho de pensar que es para un viaje hace que nos olvidemos de todo eso.

A veces se sufre y desgasta, pero ¡qué lindo es preparar un viaje!

Hasta que llega el día de partida… ¡y nos vamos!. Sólo queda subirse al avión, tomarse el tren, embarcar el crucero o encender el auto, y partir.

¿Ya? ¿Uno, dos, cuatro, seis meses, un año preparando el viaje y ya llegó el día? ¡qué rápido pasó todo!

Y tras un breve o largo viaje, nos encontramos pisando el suelo del destino que escogimos, ese que por un motivo u otro elegimos para que sea el que disfrutemos en nuestro viaje.

¿Listos para salir de viaje?

Durante un viaje, serán incontables las experiencias que acumularemos, los momentos que vamos a disfrutar, los recuerdos que vamos a acumular y llevar con nosotros para toda la vida. Una excursión, un día en la playa, una broma en el hotel, la pérdida de una maleta, y tantas, pero TANTAS cosas más que pueden derivar en un gran momento o un mal rato, pero que todo, absolutamente todo, va a formar parte de nuestra experiencia de viaje.

Un viaje solos, con familia o amigos, es una fábrica constante de recuerdos y grandes momentos, algunos gratos y otros quizá no tanto, pero grandes al fin.

Y aquí es donde decimos que el viaje se vive por tercera vez: cuando lo recordamos. Cuando volvemos, y hablamos con terceros (si es que viajamos solos) de lo que hicimos, de los lugares visitados, nuestra memoria entra en un ejercicio constante al traer al presente todas las cosas que recordamos del viaje. Y si viajamos con otras personas, más fácil será aún, porque los recuerdos de nuestros compañeros de ruta refrescarán nuestra memoria, y hasta quizá ayudándonos a refrescar momentos que habíamos pasado por alto.

Una cena con amigos, con la familia, o con quien sea… un buen momento para recordar un viaje.

Así que amigos, salgan de viaje, disfruten del armado del mismo, de toda la previa, los preparativos, pasen un gran momento, y al volver, diviértanse recordando lo sucedido, cuenten a todos sus experiencias (¡nunca se sabe si están inspirando a alguien a hacer un viaje similar!) y sobre todo… ¡Nunca pierdan las ganas de viajar!

Les dejamos una canción para empezar la semana de la mejor manera amigos: «Mago de la LLuvia«, de Mancha de Rolando. ¡Buen lunes!

 

• Agustín González Iglesias
• Tourism Experience

 

Auspició esta nota:

THR – Tour Histórico Regional

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